Toponimia



Inicio > Toponimia > Ibérica > Gipuzkoa /Ipuzkua

Gipuzkoa /Ipuzkua

Ibérica

Según Antonio Ubieto Arteta, “Cartulario de S. Juan de la Peña”, vol. II, este topónimo aparece citado en documentos de los años 1.048 (Ipuçcha), 1.049 (Ippuzka) y 1.055 Ipuscua). La última cita parece la más fiable y en ella se menciona al “senior Garsia Acenariz de IPUSCUA”. Muchas otras citas posteriores mantienen la ausencia de la G- inicial, tal como se observa en el “Diccionario Geográfico-histórico de España”, Academia de la Historia, Madrid 1.802. Estas formas documentadas tienen para nosotros una importancia capital pues nos despejan el camino para la interpretación.
Se inicia GIPUZKOA con una G- inicial protética que viene a “rellenar el hueco” -en expresión de Koldo Mitxelena- o “a tapar el hueco”, como nos gusta afirmar. Se trata del fenómeno fonético de simple alteración (f.f.s.a. nº 3) que hemos incluido en el apartado de “otras consonantes protéticas” (pág. 88 del vol. I de “Nosotros, los iberos”). Por otra parte, en Ipuzkoa observamos una desasimilación vocálica desde u-u hasta u-o, error en el que no cae la documentada Ipuskua. Veamos si, deshechas todas las alteraciones, IPUZKUA contiene una descripción ya del terreno, ya de la situación o emplazamiento en un ámbito más amplio y si, además, es conforme a la etimología.
El golfo de Vizcaya (o de Gascuña) se extiende, grosso modo, desde el cabo Ortegal en Galicia -otros prefieren hablar del Cabo de Ajo- hasta la Punta de Pern en la Bretaña francesa. Tracemos una línea diagonal entre ambos puntos y reparemos solamente en el espacio marino-cantábrico encerrado entre dicha línea y la tierra. Ahora, avivemos nuestra imaginación, igual que hacían nuestros antepasados constantemente (el hombre muerto, parece una persona, la cala del perro, de la cuna, del puño, etc.) y ¿qué nos sugiere la mancha azul de esto golfo?. A buen seguro que, para unos, nada; a otros, imágenes diversas; pero sabemos con certeza lo que sugirió a nuestros antepasados porque nos lo describen con IPUZKUA.
Se trata de una construcción de la lengua ibérica integrada por tres formas. La primera es IPUR, variante de ipurdi, que significa “culo, trasero” o, también, “base o fondo de una vasija”. A ésta viene a unirse UZKU, trasero, y se acomoda con elipsis al final del primer término, IPU(r)UZKU; tras esta elisión, el encuentro de vocales iguales nos lleva a IP(u)UZKU. Por último, el artículo determinado A que se une por yuxtaposición necesaria, ya que la elipsis, IPUZK(u)A, hace imposible la comprensión (caso a). El artículo ibérico se traducirá por “El” si hemos aceptado “fondo”, y por “La” si optamos por “base”. La totalidad de la costa de Gipuzkoa y el tramo inicial de la de los Pirineos Atlánticos ocupan, con toda evidencia, “el fondo del trasero”. No se enfade con nuestros ancestros, sonría… ¡estos iberos…!

Entradas relacionadas


  • No Related Post
 

Desarrollo: Interesa.es

© Bienvenido Mascaray bmascaray@yahoo.es

RSS